viernes, 18 de enero de 2013

Sitio Arqueológico de Hornos de Segura





El núcleo de población de Hornos de Segura se encuenta situado sobre un promontorio rocoso de 867 m. de altitud, en el valle formado por los ríos Trujala hacia el Norte y Hornos hacia el Sur. Hacia el Noreste las pendientes están suavizadas ya que se inician las estribaciones de las sierras de Pontones y Santiago de la Espada, mientras que hacia el Sur y el Este el desnivel es bastante acusado, elevándose el promontorio algo más de 200 metros sobre las escarpadas pendientes. El centro de este promontorio es amesetado, a excepción de una pequeña elevación en la que se ubican los restos arquitectónicos del castillo.

El enclave de la actual población de Hornos de Segura fue estudiado en 1974 por J. Maluquer. Este estudio documentó una continuidad en la ocupación desde el III milenio a. de C. hasta mediados del II a. de C. Se trataba de un poblado en altura adscrito culturalmente a la Edad del Cobre y del Bronce.

 Maluquer distingue cuatro etapas en este período de ocupación.
Califica a las dos primeras (Hornos I y II) de fundación. A ellas pertenece una edificación groseramente circular de unos 6 ó 7 m. de diámetro. En esta cabaña se documentaron varios hogares de Hornos II que Maluquer consideró producto de sucesivos desplazamientos, pero que pudieron ser contemporáneos como se ha comprobado en Cazalilla o Marroquies Bajos, lo que indicaría un espacio compartido por varias familias. En cuanto a la cultura material hallada en la excavación, destacan instrumentos pequeños realizados en sílex y punzones de hueso. La vajilla revela una fuerte tradición neolítica diferenciándose de la realizada por los habitantes de la Campiña. Son cerámicas lisas o decoradas con acanaladuras, puntillado, incisiones formando líneas paralelas y digitaciones.

La tercera etapa (Hornos III) corresponde a un momento avanzado de la Edad del Cobre. En ella se mantiene la cultura material de tradición neolítica descrita, pero se documentan dos elementos nuevos: instrumentos de metal (punzón de cobre) y material cerámico decorado al estilo inciso campaniforme. (RUÍZ RODRÍGUEZ, A. 1997).
La última etapa (Hornos IV) corresponde a la Edad del Bronce con características de la Cultura del Argar, en auge en la zona de Almería durante la mitad del II milenio a. de C. Se caracteriza por una cerámica lisa y con la superficie exterior bruñida. En esta etapa se observa la continuidad de una población que, sin embargo, ha sufrido una aculturación. Probablemente en este momento se han sustituido ya las cabañas circulares compartidas por estructuras rectangulares unifamiliares, sustitución contemporánea a la ocurrida en Peñalosa (Baños de la Encina) o Iznatoraf, pero no ha podido ser documentada en Hornos. Esta hipótesis se ve reforzada por la existencia de sepulturas bajo las viviendas de dos tipos: cistas de piedra y el pithoi (recipiente cerámico de gran tamaño). Tras esta fase se abandona el asentamiento, sin que se halla podido documentar una posible ocupación del lugar hasta la Edad Media. (RUÍZ RODRÍGUEZ, A. 1997).
Hornos está claramente reflejado en las fuentes árabes, en las que se denomina "Hisn Fornus". En esta época debió tratarse de una aldea defendida por la inaccesibilidad de su enclave y un recinto murado que pudo contar con otra defensa en su zona más elevada. Algunos tramos del recinto antíguo pueden observarse hoy entremezclados con las edificaciones de la población (SALVATIERRA CUENCA, V. 1997, CASTILLO ARMENTEROS, J.L.... et al. 1997).
El castillo actual debió ser construido por la Orden de Santiago, tras su conquista, en el S. XIII. Es muy posible que se limitaran a reutilizar parte de las estructuras existentes y a edificar un alcázar en la zona más elevada del cerro (SALVATIERRA CUENCA, V. 1997).
El castillo de Hornos controlaba, desde su inmejorable posición, uno de los caminos históricos que transcurría entre las sierras de Cazorla y Segura, el llamado Collado de los Almendros de Cazorla, paralelo al curso del rio Guadalquivir. Dicho camino se bifurcaba al norte de Bujaraiza (Hornos), siendo el ramal que se dirigía al noroeste remontando el rio Hornos el que guardaba la fortaleza que nos ocupa (ESLAVA GALÁN,J. 1989,1999).
La localidad fue conquistada por Don Pedro Pérez Pelayo Correa, maestre de la Orden de Santiago, en 1239, tras lo que quedó adscrita a la Encomienda de Segura de la Sierra. Dependía de la chancillería de Granada y del obispado de Cartagena. Fue villa desde el reinado de Fernando III (VILLEGAS DÍAZ, L. R., GARCÍA SERRANO, R. 1976).
Hornos, junto con Segura de la Sierra, fue uno de los lugares de proyección de la política de la familia Manrique en el S. XV, enfrentada a los monarcas Juan II y Enrique IV. Los Manrique controlaban gran parte de los recursos de la Orden de Santiago, gracias a los cuales Rodrigo Manrique, desde su posición como comendador de Segura, se proclamó Gran Maestre de la Orden, resistiendo y derrotando a las tropas de Juan II y Don Älvaro de Luna en Hornos

 Como consecuencia de la guerra civíl, en 1468 la localidad se encontraba completamente despoblada .

Continuó formando parte del señorío santiaguista de Segura de la Sierra durante toda la Edad Moderna, perteneciendo al Reino de murcia entre 1507 y 1748. Hasta el S. XIX la población se dedicó a la agricultura de subsistencia, especialmente centrada en el cultivo cerealístico.
La distribución urbanística del casco, cierra todas las posibilidades de expansión en la actualidad, a excepción de la parte Noreste, donde se han construido viviendas de nueva planta.El área que hemos definido de interés arqueológico viene delimitada por las noticias que sobre la remodelación de viviendas hemos tenido, y por el afloramiento de las calizas de base en el resto de la extensión del casco urbano. Esta delimitación está marcada claramente desde la calle Parras, la plaza de la Rueda y hacia el Suroeste por la plazoleta y la calle de San Bartolomé, para cerrar por el Norte, en la puerta de la villa. Hornos se encuentra en estado de erosión total debido al afloramiento de la caliza de base en varios puntos: desde la calle de la iglesia, calle Parras hasta los aledaños del castillo.( Base de datos del Patrimonio Inmueble de Andalucía)

No hay comentarios:

Publicar un comentario